sábado, 17 de enero de 2009

Una muñeca de plástico

Me siento como si viviera en un mundo artificial, como si cada movimiento estuviese supervisado, tengo la sensación de que todas las personas de mi alrededor saben lo que va a pasar a lo largo del día. Me siento engañada, ignorante.

Es como si la vida fuera un Show de Truman, un programa televisivo y un único engañado.
Percibo que las amistades son de plástico, por muy verdaderas que las sienta. Que los amores son postizos y para entretenimiento del interesado.

Una mentira mundial, una sociedad sin valores...
Y yo aquí, sintiendome sola...

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Y ya que estamos aprovecho para remitirme a una querida amiga, que causó estragos en mi vida...

QUERIDA AMIGA

Vuelvo a enfrentarme a la idealización creada en mi mente, los autores...¿las circunstancias? Que decir, tragedias privadas sufridas como mundiales. Pérdida de amistades, que en un momento fueron parte de ti y de tu vida, el azúcar que endulza el café, la amargura de la vida...llevada mas amena gracias a estas personas que ahora, se convierten en el sabor amargo.
Graciosas circunstancias, perfecta ironía, mi vida, ha muerto. Ando vacía, miro sin observar, pienso sin profundizar, toco sin palpar...como bien dije, amiga si tu te marchas mi mundo...se desmorona.
Cayó en el sistema social, cayó en la superficialidad, abandonando su alma y pudriéndose en los valores de la estética, olor a belleza artificial, querida hermana, apestas a consumismo, perdiste los valores, perdiste el norte, me perdiste.
Que alto precio pagaste por dos grandes y voluminosos senos, que precio por un hombre...que digo hombre, niñato de barrio bajo ignorante y con neuronas atiborradas de hormonas. Ja! Me rio de tu falsa felicidad y de tus amistades traicioneras, me río de tu forma de vida, me mofo de tu futuro, dulce niña con tez bonita.

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